Capítulo 5
Y allí estábamos los 3, mirándonos sin saber que hacer, ahora ¿ cambiarían nuestras vidas?.
Se acercaba por el pasillo con aquel cartel, mejor dicho, con aquel vergonzoso cartel con mi cara. Se quito sus gafas de sol y vino hacía nosotros.
-Hola, tu debes de ser mi prima Marta ¿verdad?-me dijo poniéndose delante mía, mientras se subía las gafas.
-Si, y tu debes de ser Sofia, mi prima ¿no?-me atreví a decir.
-Si, pues perfecto, aquí tienes mi maleta cógela y vamonos -dijo tirando el cartel al suelo-
-¿Perdona?-se me descompuso la cara- ¿tu estas pira verdad?
Ella ni me escucho, se dedico a dejar las maletas allí y salir del aeropuerto como el que sale de su casa a comprar el pan. Yo no le iba a coger las maletas, pero Alberto y Hector se ofrecieron para evitar discusiones. Eso si, me lleve el cartel aquello no era apto para propensos a un infarto.
Los 3 íbamos juntos y ella iba en cabeza del grupo, parecía que se conocía el lugar, pero no al llegar a la puerta paro y solo nos dijo:
- ¿Vamos en coche o os tengo que pagar un taxi que nos lleve a casita?-dijo con un tono muy superficial.
-Sofia, tu si quieres puedes irte en un taxi, nosotros nos vamos en el Ferrari que tenemos en la zona vip del parking-dije con ironía-
- No no, ahora somos una chupi pandi y tenemos siempre que estar juntos pri- nos dijo abrazándonos a los 3-
-¿Pri? ¿Que eres un timbre, un despertador o un politono del teléfono?- nos echamos los 3 a reír- Marta Sofia, Marta
-Como quieras Marta, ¿ dónde tenéis el Ferrari dices?-nos dijo mientras que agitaba la cabeza hacia un lado y hacia otro-
-Esta pava se lo a creído -pensé-
-Hay que cruzar la calle -dijo Hector señalando con el dedo el lugar-
Entre Hector y Sofia había miradas seductoras, a las que yo llamo rayos X, esas que te pueden hacer una radiografía y sacarte los huesos rotos en menos de 3 segundos, pues esas.
Llegamos al coche y la cara de mi prima era un poema de la "Generación del 27" por lo menos.
-¿ Este es vuestro Ferrari? -dijo sorprendida y decepcionada.
-Creo que has acertado, ya sabes lo que dicen no te dejes llevar por las apariencias, lo importante esta en el interior -dije dándomelas de filosófica-
Todos entramos en el coche nosotras nos sentamos atrás yo pase la primera, ya que nuestro Ferrari era de 2 puerta, y detrás mio paso Sofia, y Hector no puedo aguantarse las ganas de mirarle el culo.
-Hector-le chille-
¿Qué, qué, qué quieres?-dijo aturdido-
-Buenos Días Compy -dije con una sonrisa cómplice-
El solo se limito a reír, que eso quería significar, " me has pillado con los ojos en la masa".
Una vez todos sentados en el Ferrari, que tengo que decir que de Ferrari nada, en un coche minúsculo y antiguo, pero nos podemos dar con un canto en los dientes que se le puede meter un CD.
Lo primero que hizo Sofia una vez arrancado el coche, fue meter su cuerpo en la parte delantera del coche y quitar mi CD, en el coche solo se escucho un sonoro EEEEEEEEEEEH!
Ella abrió los ojos y Alberto volvió a poner el CD. Eso fue un lujo, un detallazo y como yo digo "Los detalles marcan la diferencia"
A mi en ese momento solo me salio sonreír y a ella solo le salio poner las gafas de sol, dejar la cestita del perro entre ella y yo y poner cara de oler a mierda, con un morro que le llegaba a la luna del coche.
Por el camino a casa, no dirigimos palabra cada uno iba a su bola, Alberto conducía, Hector iba leyendo una revista, Sofia estaba trajinando con el perro y el perro bastante tenia con tener que aguantarla, yo saque mi móvil y empecé a leer conversaciones antiguas, eso que nunca se debe hacer.
Llegamos a casa, salí del coche cantando la primera canción del recopilatorio -Que Nadie-, ella salio detrás mía y empezó a coquetear con Hector, este le saco las maletas del coche y se las llevo hasta la casa, una vez allí el metió las maletas a mi habitación.
-Te quedaras en el sofá de momento, hasta que preparemos alguna habitación para ti.
-¿Me vas a dejar en el sofá Marta?-me dijo sorprendida-
-Si, es lo que te toca Sofia.-dije con un tono serio-
-Vale, lo que digáis, pero ahora quiero salir un rato fuera, quiero conocer el barrio.
-Cuidado y no te pierdas.
-Créeme intentare no hacerlo, y allí soltó al perro y se fue.
-EEHH, EEHH, EEHH,- le chille cogiendo la cestita del perro con el dentro- que tu chucho quiere conocer mundo, llevatelo. Lo cogió y se fue.
En ese momento solo tenía ganas de coger mis cascos, encerrarme en mi habitación y escuchar mi música, así que eso hice no me lo pensé 2 veces. Me senté en la cama, puse mis canciones a todo volumen y me dedique a cerrar los ojos. En esos momentos se me vinieron personas imborrables en mi vida a la cabeza, ya sabéis
" Detrás de cada canción hay una persona", pues detrás de esta canción había una persona única, de la que me costo muchísimo separarme y de la que todavía no me he acostumbrado a no tenerla conmigo, peleándonos cada día como hacíamos siempre y ella es mi amiga Lourdes. Con ella todo era una pelea constante, pero hasta las peleas eran especiales, nunca me olvidare de ella, son de esas personas que marcan huella, un día de estos me lió la manta a la cabeza y me voy a verla, decidido.
Creo que estuve como 2h escuchando las mismas 4 canciones, cuando alguien entro en mi habitación, ¿quién iba a ser si no ella?.
-Marta, ya he llegado-entró y se sentó a mi lado en la cama-¿ te pasa algo?
-No, nada-le dije limpiándome las lagrimas de los ojos- recuerdos bonitos que todos tenemos y que duelen no poderlos volver a repetir con esa gente única.
-Te entiendo-me abrazó-
Con aquel abrazo volví a ver aquel espejismo que vi cuando Hector no llegaba a casa, pero ¿qué tenía que ver ese espejismo con aquella situación?
No será lo que estoy pensando....
@LaaCortes

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